En Saint-Joachim, una pequeña ciudad francesa, se desarrolló un innovador proyecto comunitario de paneles solares sobre su cementerio para distribuir energía renovable a los habitantes de la localidad. A partir del verano boreal de 2025, esta instalación, valorada en 3,35 millones de dólares, proveerá electricidad limpia y accesible a la ciudad. El sistema tiene una capacidad energética de 1,3 megavatios. Eso marca un paso significativo hacia la autosuficiencia energética del municipio.
La iniciativa detrás de la cubierta solar para el cementerio está liderada por Brier’energie, asociación energética francesa. Éric Boquaire, al frente de Brier’energie, dijo que la instalación contará con 5.000 paneles solares. Además, reciben respaldo de la Fundación de Francia, entidad gubernamental que promueve la colaboración de filántropos y corporaciones.
La ciudad de Saint-Joachim, ubicada en la marisma de Brière, Francia, se ha enfrentado durante años al desafío de las inundaciones invernales en su cementerio debido a que se encuentra cerca de un pantano. La implementación de la cubierta solar viene a solucionar este problema, además de reutilizar el agua para el riego de áreas verdes durante los secos meses de verano boreal.
“Creo que es una idea preciosa”, agregó Broquaire, residente de Saint-Joachim, optimista sobre la replicabilidad de la iniciativa en otras localidades.
Este esquema energético comunitario se distingue por su accesibilidad, con una cuota de inscripción de solo 5 dólares, lo que les permite a los residentes formar parte de esta revolucionaria empresa. Hasta la fecha, alrededor de 420 de los 4.000 residentes de la ciudad han expresado su interés en participar.
La arquitectura del proyecto incorpora paneles solares semitransparentes para permitir el paso de la luz, lo que tuvieron en cuenta debido a la sensibilidad del lugar. Esta innovación responde a una necesidad energética y también transforma un área de otro modo infravalorada en una fuente de energía verde.
La distribución equitativa de la electricidad generada es una faceta clave del proyecto. También requirió el desarrollo de un nuevo algoritmo para asegurar un reparto justo entre los participantes. En este sentido, Brier’energie estima que los hogares involucrados podrían ahorrar entre 150 y 250 dólares anualmente en sus facturas de electricidad. Este innovador sistema, que tomará lecturas de consumo cada 30 minutos, permitirá a la operadora de red Enedis realizar los cálculos necesarios para aplicar las deducciones correspondientes a fin de mes.
El financiamiento completo del proyecto por parte del municipio, gracias a los beneficios fiscales derivados de un aumento del 7% en el impuesto de bienes inmuebles el año pasado, evidencia un compromiso municipal con la sostenibilidad y el bienestar comunitario. Esta iniciativa no solo fortalece el vínculo entre los ciudadanos y su entorno, sino que también sienta las bases para una futura autosuficiencia energética.
“Para mí era muy interesante tener un proyecto común”, explicó Broquaire, y destacó el enfoque comunitario de la iniciativa.
El proyecto del cementerio solar de Saint-Joachim resalta la capacidad de las comunidades para innovar en la producción de energía verde y ofrece una visión para el futuro de la sostenibilidad urbana. Al tomar un espacio comúnmente asociado con la pérdida, como lo es un cementerio, y transformarlo en una fuente de vida y energía, Saint-Joachim demuestra que las soluciones a los desafíos climáticos y energéticos pueden encontrarse en los lugares más inesperados.
La iniciativa de Saint-Joachim aborda el requerimiento de energía renovable y también reafirma el valor comunitario, la innovación tecnológica y el respeto por el medio ambiente. El pueblo francés marca un precedente en el manejo de recursos renovables en ámbitos urbanos.
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