El Gobierno de Gustavo Petro ganó un nuevo round en el trámite del proyecto de reforma pensional, que empezará a discutirse en febrero de 2024.
Al respecto de dicha iniciativa, que se basa en un sistema de pilares (solidario, semicontributivo, contributivo y de ahorro individual, así como el fondo de ahorro con el único fin de utilizar los recursos para pagar las mesadas), la ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez, afirmó que los senadores podrán estudiarla en durante el periodo de receso para tener claro conocimiento ante un texto que es bastante técnico.
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El senador Carlos Fernando Motoa, del Partido Cambio Radical, manifestó que es inadmisible que pretendan discutir la reforma pensional en el Senado a tan solo tres días del receso del período legislativo.
“Ojalá el Gobierno nacional, sus bancadas e ‘independientes’ como el Partido de La U, no eviten su responsabilidad y den una discusión técnica, con consensos y en el tiempo pertinente”, apuntó.
Dijo que le parece que la decisión adecuada, acertada, responsable para el país, es que se discuta el próximo año, en el próximo periodo.
“No corresponde que esta iniciativa sea discutida en una sesión extraordinaria, ni tampoco en una época de receso legislativo. Por eso comparto el criterio y respaldo que sea debatida a partir del próximo año”, anotó.
De igual forma, la senadora Lorena Ríos Cuéllar, del Partido Colombia Justa Libres, informó que solicitó el aplazamiento del debate de dicho proyecto de ley y el archivo del mismo por el riesgo que trae para los trabajadores del país.
“El futuro de más de 25 millones de trabajadores debe darse de cara al país y con el suficiente tiempo para evidenciar los errores técnicos y las preocupaciones legítimas de la ciudadanía. Por nuestros jóvenes pido el archivo a la reforma pensional”, enfatizó.
Impacto fiscal de la reforma pensional
Es de recordar que hay una fuerte discusión por las inquietudes que hay en torno a los costos e impacto fiscal que tendría el sistema pensional que propone el Gobierno nacional. Esto, debido a que el Ministerio de Hacienda entregó en octubre del 2023 sus propios estimativos sobre esto.
La cartera indicó que el pasivo pensional pasaría de ser 84,2% del Producto Interno Bruto (PIB) a 126,8% en el 2.100. De estos, los pilares contributivo y semicontributivo aportarían 101,29 puntos del PIB.
Para la Asociación Colombiana de Administradoras de Fondos de Pensiones y de Cesantía (Asofondos), el documento de 12 páginas revela una foto preocupante que muestra coincidencia con cálculos elaborados por varios centros de pensamiento y expertos.
“Vemos con preocupación estas cifras de Hacienda, sus propios estimativos muestran un sistema inviable, tremendamente costoso para la actual y futuras generaciones, tanto que no habrá recursos para pagar las pensiones”, afirmó Santiago Montenegro, presidente de Asofondos.
Si bien reflejan el tremendo incremento en el costo, las cifras del Gobierno podrían ser aún más preocupantes, pues se basan en supuestos optimistas, como una tasa de descuento muy alta que reduce significativamente el pasivo pensional. Si se utilizara un 3% de tasa de descuento, el pasivo sería de un 186% del PIB, una cifra más preocupante aún.
“Es de tal magnitud el incremento en la deuda pensional del país que con esos recursos podrían costearse 45 líneas de metro en Bogotá”, explicó Montenegro.
Para Asofondos el mismo Gobierno a través de este análisis del propio Ministerio de Hacienda está dando los argumentos para modificar aquellos aspectos que en lugar de generar ahorro, disparan el gasto.
“No se entiende cómo el ministerio termina avalando el proyecto, con estas cifras de sus propios expertos”, agregó el dirigente.
Asofondos insiste en la necesidad de que la discusión en el Congreso de la República conduzca a una reforma pensional que sea sostenible en el tiempo y cubra los riesgos de la vejez para las actuales y próximas generaciones. Reformarnos sí, pero no así. Sigamos construyendo el mejor futuro pensional.
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