Sumar a un cánido en la familia es una decisión importante que no puede tomarse a la ligera, cada raza tiene comportamientos, hábitos y necesidades particulares de su especie. Elegir una mascota cuya personalidad no se adapte a tu estilo de vida podría traer algunos problemas en la convivencia diaria.
Para esta importante elección debes de tomar en cuenta el tamaño de la residencia, si la mascota va a convivir con niños, el tiempo disponible para sus paseos y si es compatible con el estilo que llevas.
Bajo estos motivos te compartimos las características del Bóxer, su historia, cuidados básicos y los tamaños promedio cuando alcanzan su edad adulta. Así como algunos consejos que te ayudarán a instruirlo de la mejor manera, según la página web de Purina.
Origen y personalidad del Bóxer
El Bóxer es un perro de tamaño mediano, musculoso, robusto y ancho de pecho. Tiene un morro corto y un mentón ligeramente curvado hacia arriba. El color del pelaje corto puede ser marrón y atigrado, normalmente con algunas marcas blancas; también puede ser totalmente blanco. La altura media de los machos adultos es de 57 a 63 cm y su peso oscila entre 30 y 32 kg. Las hembras adultas alcanzan los 53-59 cm y un peso aproximado de entre 25 y 27 kg.
Los bóxers se suelen comportar como cachorros durante toda su vida, por lo que dan bastante guerra. Activos, fuertes y leales, son grandes mascotas para toda la familia, tanto para adultos como para niños, pero pueden ser bulliciosos, por lo que no son recomendables en hogares con niños muy pequeños. Son valientes y seguros de sí mismos, no se enzarzan en peleas fácilmente, pero son más que capaces de defenderse si se ven obligados. Pueden ser muy destructivos si se les deja solos en casa durante periodos de tiempo prolongados.
El bóxer viene de dos perros tipo mastín utilizados como perros de caza durante la Edad Media en Alemania. Estos perros se utilizaban para la caza de jabalíes, osos y ciervos. Los antepasados del bóxer también se usaban en las peleas contra toros cuando esta actividad se convirtió en un deporte. En el siglo XIX, estas razas se cruzaron con el bulldog y se creó así el bóxer.
Los beneficios de tener un perro
Una mascota de compañía trae muchos beneficios a la vida de las personas, pues la constante interacción con ellos genera resultados positivos en la salud física, familiar y de la comunidad en la que se desarrolla, de acuerdo con una investigación realizada por Human Animal Bond Research Institute (HABRI), organización a favor de los animales de compañía.
Steven Feldman, director de dicha asociación, explicó en su investigación que los perros o gatos son capaces de "amortiguar el estrés y ayudar a abordar el aislamiento social". Convivir con un compañero peludo influye en gran medida a cuidar los niveles de presión arterial, frecuencia cardíaca y ayuda a la producción de hormonas relacionadas con el bienestar.
La misma organización realizó una encuesta en 2021 para evaluar qué tanto cambió la vida de las personas antes y después de integrar a un perro a su círculo familiar y los resultado impresionaron a los investigadores, pues el 61 por ciento de los propietarios aseguró que consideraría cambiar de casa con tal de que su mascota estuviera cómoda y el 45 por ciento buscaría cambiar de trabajo para compartir más tiempo con el animal.
Hacer Comentario