Desde que el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) tomó posesión de su cargo en 2018, no sólo ha contado con el apoyo del partido que fundó, el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), también de los llamados “aliados” como el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) y el Partido del Trabajo (PT), conformando así la llamada Cuarta Transformación.
Fue ante la dinámica política que se ha establecido en el país, entre el oficialismo y la oposición, que tomó por sorpresa que los tres partidos decidieran ir separados en la elección por la gubernatura de Coahuila, incluso negándose durante meses a unirse al proyecto de Armando Guadiana Tijerina, representante de Morena en los comicios.
No obstante, el pasado 27 de mayo la dirigencia nacional del Partido Verde anunció que su apoyo dejaría de ser a favor de Lenin Pérez y pedirían el voto para el morenista. Días más tarde, este martes 30 de mayo, el Partido del Trabajo realizó una jugada similar y señaló que su apoyo sería para el senador con licenciado, dejando solo a Ricardo Mejía Berdeja.
¿Qué consecuencias podría traer esto?
Es importante aclarar que los candidatos no han declinado, sino que fueron sus dirigencias nacionales las que dieron los mensajes, por lo que ellos continúan en la contienda por la gubernatura, además de que las boletas ya fueron impresas e incluso entregadas a algunas de las oficinas locales del Instituto Electoral de Coahuila, dejando la situación muy similar a como se encontraba previo a la declinación.
No obstante, resulta fundamental destacar que cualquier voto de la ciudadanía hacía el PT o al PVEM no irá para Regeneración Nacional ni su candidato, sino que tendrá como destinatario estos partidos, razón por la cual el dirigente nacional del partido guinda, Mario Delgado Carrillo, ha pedido “voto masivo” para su instituto político.
“Este domingo voten por Armando Guadiana de manera masiva para evitar que gane el @PRI_Nacional”
La estrategia podría tener una consecuencia difícil para el PVEM y el PT, pues al pedir el voto masivo para el partido guinda lo que se podría ocasionar es que individualmente no alcancen el mínimo porcentaje de sufragios que indica la ley, poniendo en riesgo su registro local.
De acuerdo al artículo 41 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos (CPEUM), los partidos políticos nacionales podrían perder el registro si no obtienen, al menos, el tres porciento del total de la votación valida.
“El partido político nacional que no obtenga, al menos, el tres por ciento del total de la votación válida emitida en cualquiera de las elecciones que se celebren”
Algo que ya vivió el PT, tan sólo en la elección del 2017, el instituto postuló a la gubernatura a José Ángel Pérez Hernández, quien obtuvo 19 mil 198 votos, es decir, sólo alcanzó el 1.52% del total de la votación; sin embargo, el partido retuvo su registro debido a la votación por el Congreso de la entidad.
En aquella ocasión, el Partido Verde no vivió una situación así, pues postuló en coalición al actual gobernador Miguel Ángel Riquelme Solís, misma que ganó con el 38.90% de la votación al alcanzar 482 mil 891 sufragios.
Conviene destacar que, más allá de lo que suceda en los comicios del próximo domingo, con la decisión de su dirigencia nacional, el Partido del Trabajo se consolidó como el único partido —de los que actualmente tienen registro— que no ha ganando una gubernatura de forma individual desde su fundación, pues en las mayoría de los procesos decide ir en coalición.
Finalmente, ambos partidos dejaron en claro que la decisión de declinar a favor de Morena tiene como objetivo principal fortalecer al movimiento de la 4T, así como el trabajo que han realizado en conjunto durante todo el sexenio.
Hacer Comentario