Un grupo de 20 jornaleros originarios de Chiapas fueron secuestrados por civiles armados que los confundieron con migrantes mientras se dirigían a trabajar en el municipio de Zaragoza, Veracruz.
Entrevistado por medios locales, uno de los hombres plagiados narró como al circular durante la madrugada de este martes por la autopista Cosoleacaque-La Tinaja un comando interceptó las camionetas en que viajaban y se los llevó a una parte despoblada del municipio.
Ahí les dijeron que tenían que pagar una “cuota” para poder seguir su camino con rumbo a la frontera norte; a los choferes de las camionetas, quienes pensaron que eran “polleros”, también les exigieron pagar para poder “traficar migrantes” por la región.
El secuestro de los 20 jornaleros de Chiapas duró varias horas hasta que lograron identificarse como trabajadores que cada año se emplean en los campos de cultivo de piña y limón de la región, solo entonces los dejaron en libertad.
Horas más tarde y después de presentar la denuncia ante la Secretaría de Seguridad Pública, policías de Veracruz lograron identificas a uno de los secuestradores, un hombre que circulaba a bordo de un taxi y que se presume es integrante de uno de los grupos criminales que controlan las extorsiones y el cobro de piso en la zona.
Migrantes desaparecidos en México
Hasta agosto del año pasado organizaciones civiles contabilizaron un total de mil 801 migrantes en calidad de desaparecidos entre los más de 110 mil personas en la misma condición en México.
La mayoría de los migrantes desaparecidos provienen de Honduras (347), Guatemala (307), Colombia (169), El Salvador (147) y Nicaragua (76), a lo largo de las distintas rutas que utilizan para llegar a la frontera con Estados Unidos, las mismas que son controladas por grupos criminales para enviar drogas y cometer delitos como secuestros y extorsiones.
La Ruta de Veracruz atravesando Chiapas y Tabasco hasta llegar a Tamaulipas es justamente una de las más peligrosas para los migrantes que entre sus principales retos son el lenguaje, la falta de alimentos y resguardo, pues constantemente se encuentran a violaciones, robos, secuestros, reclutamientos forzados y asesinatos a manos de los cárteles de la droga.
Aunque los puntos más peligrosos son cerca de la frontera con Estados Unidos como el corredor Tamaulipas-Chihuahua y la carretera de San Fernando a Matamoros, otros puntos como el camino de Chauites (Taxaca), Tehuacán (Puebla) y Coatzacoalcos (Veracruz) son considerados de alto riesgo para los migrantes.
Cárteles del narco se disputan Veracruz
A pesar de ser una región históricamente controlada por el Cártel del Golfo (CDG), otras organizaciones han logrado penetrar en Veracruz y disputarse el control de la plaza para el trasiego de drogas con rumbo a la costa este de Estados Unidos.
Desde la presencia de Los Zetas -ex brazo armado del CDG-, Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), Cártel del Noreste y Cárteles Unidos son algunos de los grupos con mayor presencia en la entidad; aunque otros grupos más pequeños como El Grupo Sombra, el Cártel del Siglo, Los Ántrax y La Banda del Bucanas también se disputan la plaza.
Hasta el año 2022 un estudio del Programa de Política de Drogas del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE) encontró que de las 150 bandas delictivas en el país, 13 tenían presencia en Veracruz.
Entre los delitos más frecuentes son el robo a transportistas, extorsiones en carreteras y comercios y el secuestro de migrantes y cobro de piso a “polleros” que utilizan la ruta de Veracruz para llevar cada año a miles de migrantes a la frontera con Estados Unidos.
El último hallazgo de migrantes trasladados en condiciones inhumanas por carreteras de Veracruz se registró durante la mañana de este nueve de enero cuando personal del Instituto Nacional de Migración (INM) rescató a 182 personas que eran transportados en un autobús de pasajeros procedentes de Guatemala y Ecuador.
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