Los perros llegan a ser muy curiosos con aquellas cosas que no conocen o de las cuales no tienen el conocimiento adecuado, por lo que pueden estar expuestos a distintos peligros aún dentro del hogar, como lo puede ser la picadura del algún insecto o ingerir alguno que los coloque en riesgo, como el caso de comer una cucaracha, situación que puede traer diversas repercusiones para tu peludo amigo.
Una blattodea, como se le conoce científicamente a estos insectos, puede transmitir distintas enfermedades en su cuerpo debido a los lugares en los que comúnmente se oculta o por los alimentos que va adquiriendo durante su día a día.
Sufrir por una plaga de cucarachas puede ser una de las situaciones más desagradables, sobre todo porque estas se relacionan con la suciedad, no solo en el interior de la casa, sino por lugares externos, siendo así que pueden provocar asco en quien las ve o intenta eliminar, representando un trabajo complicado su eliminación.
Sí eres de las personas que adora tener un perro como mascota, seguramente en algún momento haz sentido miedo al saber que puede estar expuesto al ataque de diversos insectos o animales, además de la incertidumbre de que pueda comerse alguno que sea dañino para él, sobre todo sí ya observaste algún ejemplar o tuviste que lidiar con su eliminación.
Qué riesgo corre un perro al comerse una cucaracha
Es importante saber que un “lomito” puede tener curiosidad por aquellas cosas que no conoce, sobre todo si como en el caso de las cucarachas tienen movimiento, por lo que sí puede ocurrir que ingiera uno de estos insectos, lo que podría repercutir directamente en su estado de salud.
Las blattodeas pueden ser transmisoras de distintas enfermedades como los son la salmonella, estafilococos y estreptococos, además de al menos 50 bacterias patógenas como la cólera, meningitis, brucelosis, tétanos y tuberculosis, mismas que pueden afectar a los perros y gatos en el hogar. Sobre todo, dichos males pueden viajar rápidamente a través del aparato digestivo, por lo que si una mascota se llega a comer una cucaracha es un hecho que presentará malestares.
Algunos de los problemas que podrían presentarse con ello, son fiebre, diarrea, vomito, cambios en su forma de actuar y falta de apetito, por lo que sí tu perro presenta alguno de estos deberás acudir a un veterinario para que sea revisado de forma inmediata. Estos síntomas también pueden presentarse con otro tipo de bacterias, por lo que es difícil saber si una mascota se comió una cucaracha, a menos que haya sido visto de forma directa por el dueño o que haya dejado algún indicio.
Varios expertos han señalado que los efectos serán iguales si la cucaracha estaba viva o muerta, ya que las enfermedades seguirán dentro de su cuerpo. En caso de que el insecto haya muerto por algún tipo de veneno o insecticida, tu mascota no correrá riesgo debido a que la diferencia de tamaños no representará una situación de riesgo para él.
Aunque existen insecticidas o remedios caseros, como el ácido bórico, que si pueden resultar tóxicos para las mascotas, por lo que si decides utilizar alguno de estos como solución contra estos insectos, deberás tener especial cuidado para que tu perro no las ingiera después de que fueron eliminadas.
Sin embargo, ese no será el principal problema que enfrentará si, por el motivo que haya sido, decide comerse una cucaracha.
Recuerda de igual forma que si colocas su alimento en el suelo y tienes una plaga de estos insectos, será importante que lo recojas durante la noche para evitar que este se convierta en una fuente de alimentación para ellas y además, no dejen algún tipo de bacteria en el recipiente de tu mascota que pudiera representar alguna infección.
Por último, es importante señalar que los seres humanos también se encuentran expuestos a estas enfermedades.
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