La princesa Leonor ha vivido en la mañana de este martes 21 de mayo una de las citas clave de su vida, pues ha sido homenajeada en la ciudad de Zaragoza con tres de las condecoraciones más importantes de la región: Medalla de Aragón, la Medalla de las Cortes de Aragón y el título de Hija Adoptiva de Zaragoza.
La heredera al trono ha acudido a la cita vestida con el uniforme de gala de cadete de segundo curso de la Academia General Militar de Zaragoza. Un traje formado de pantalón y chaqueta de color caqui, camisa blanca, zapatos negros con cordones rojos y corbata negra. Sonriente y con el cabello recogido en un moño bajo la boina grancé, la heredera ha acudido al palacio de la Aljafería.
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Si bien se esperaba la presencia de sus padres, los reyes Felipe y Letizia, los dos se encuentran en Madrid cumpliendo con su propia agenda. El rey, por su parte, ha recibido en audiencia a los comisarios participantes en la reunión anual de la Comisión Internacional contra la Pena de Muerte (ICDP). Ha estado acompañada del presidente de Aragón, Jorge Azcón, y la presidenta de la Cámara, Marta Fernández.
En el primer acto de la mañana la princesa de Asturias ha recibido la Medalla de las Cortes de Aragón, la máxima distinción del Parlamento autonómico, como muestra del “cariño y reconocimiento” del pueblo aragonés y como “recuerdo imperecedero de un periodo relevante” de su vida en esta comunidad.
Con este objeto las Cortes buscan transmitir “el sentimiento de lealtad y respeto a la Corona y hacia el ideal de servicio de esta institución”, según se ha leído durante el acto, que ha comenzado a las 10:30 horas de la mañana. Una vez acabado el reconocimiento, la princesa de Asturias ha querido dejar escrito un mensaje en el libro:
“Muchas gracias por concederme la Medalla de las Cortes de Aragón en este Palacio de la Aljafería, que fue casa de los Reyes de Aragón.
Una ocasión especial que me ha dado la oportunidad de conocer más su historia y disfrutar de su belleza
Con todo mi afecto,
Leonor Princesa de Asturias”.
El siguiente destino de la princesa ha sido el ayuntamiento de Zaragoza, donde a las 11:15 le ha sido concedido el título de ‘Hija Adoptiva’ de la ciudad, tal y como fue aprobado el pasado 25 de abril en el pleno municipal.
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La encargada de hacerle entrega de esta máxima distinción ha sido la alcaldesa de la ciudad, Natalia Chueca, que le ha entregado el bastón de mando, el segundo de los homenajes que las principales instituciones aragonesas y de Zaragoza han brindado este martes a la heredera al trono en Zaragoza.
Ya en el interior del edificio consistorial, Natalia Chueca la ha obsequiado con el diploma, que ha recibido en un bonito marco. “Es para mí un honor, en nombre de todos los zaragozanos, hacerte hija adoptiva de la ciudad”, ha pronunciado la alcaldesa durante el intercambio.
Como detalle curioso, una vez terminadas las fotografías, la princesa se iba sin el bastón de mando, por lo que un miembro del ejército ha tenido que entregárselo.
🎖️La princesa Leonor ha recibido de manos de la alcaldesa, Natalia Chueca, el diploma que la acredita como Hija Adoptiva de la ciudad de Zaragoza. @zaragoza_es https://t.co/qAcNKV63GJ pic.twitter.com/9fvPEi8oYZ
— Aragón Noticias (@AragonNoticias_) May 21, 2024
Como es tradición, ha firmado en el libro del Ayuntamiento, donde ha dejado constancia de su paso y ha plasmado:
“Muchas gracias por concederme la Medalla de las Cortes, la medalla de Aragón y también agradezco mucho que me hayáis otorgado el título de Hija Adoptiva de Zaragoza; una ciudad que conozco y quiero más después de vivir estos meses aquí y recibir el cariño de sus ciudadanos.
Con cariño,
Leonor Princesa de Asturias”.
Esta intensa jornada para la princesa Leonor ha terminado en la Catedral de la Seo, donde a las 12 de la mañana ha recibido la medalla de Aragón, concedida por el Gobierno en reconocimiento a su especial sensibilidad durante su formación en la Academia Militar. Pero antes de entrar, la primogénita de Felipe VI ha aprovechado que hacía el recorrido a pie para acercarse al público que la estaba esperando en la plaza del Pilar, charlando y haciéndose fotografías con algunos de ellos, tal y como recoge El periódico de Aragón.
La elección de este lugar no es casual, pues se trata de un edificio simbólico e histórico donde los reyes de Aragón juraban los fueros. Leonor, por su parte, pronunciará un discurso antes de protagonizar una recepción que se celebrará en el patio del Palacio Arzobispal.
Bajo el ritmo de la marcha de Juan II, la heredera en el templo, donde ha saludado de forma militar a las autoridades del Gobierno de Aragón, dándoles después la mano. A continuación ha escuchado con solemnidad el himno de la comunidad autónoma.
El presidente de Aragón, Jorge Azcón, ha sido el primero en tomar la palabra, dedicándole unas frases a la homenajeada, que las ha recibido con emoción tras escuchar que es “merecedora del afecto general del pueblo aragonés y mostrar una especial sensibilidad hacia esa tierra”.
Las palabras de Leonor
Tras una larga ovación, la heredera al trono ha tomado la palabra y, todavía emocionada, ha pronunciado este discurso:
“Presidente de Aragón, ministra de Defensa, presidenta de las Cortes, alcaldesa de Zaragoza, autoridades, señoras, señores. Saludo en especial a todos los aragoneses que me estáis arropando en esta mañana tan emocionante.
Les confieso que cuando llegué a Zaragoza el pasado 17 de agosto venía con muchas expectativas, en parte por todo lo que me había contado mi padre, aunque también sabía que algunas etapas no serían fáciles. Aterricé en la Academia General Militar con ilusión y muchas ganas de aprender y conocer tanto a mis compañeras y compañeros de promoción, como de las otras promociones con las que he compartido este año.
Les puedo decir que lo que he vivido aquí supera con creces lo que pensaba hace diez meses. En Zaragoza, en Aragón, me he sentido en casa, acogida y acompañada en una tierra que siempre formará parte de mi vida. Quedan solo cinco semanas para que me vaya, para que reciba mi despacho de alférez, ¡y ya empiezo a echaros de menos!
No solo me he formado como cadete, sino que descubrir la exigencia académica e intelectual, física y técnica que eso significa, me hace apreciar aún más al Ejército de Tierra y a nuestras Fuerzas Armadas. Aquí he conocido a jóvenes de mi generación y he convivido con ellos. Les aseguro que lo que vivimos mientras nos formamos en la Academia nos une para siempre y nos hace madurar y crecer gracias al compañerismo, a la guía de manso y profesores y a todas las personas de la Academia que nos impulsan para seguir avanzando y mejorando. Aquí hemos jurado bandera, aquí hemos superado momentos que requerían esfuerzo y un gran trabajo de equipo, aquí hemos disfrutado y sufrido juntos y, sobre todo, aquí aprendido mucho.
En estos meses he sentido el respeto y la amabilidad de los aragoneses que, además, me están acompañando en esta mañana tan importante para mí. Su apoyo ha sido y está siendo continuo, tanto en la Aljafería, como en la plaza del Pilar y en la Seo del Salvador, lugares históricos donde la tradición y el simbolismo se proyectan con fuerza en el alma de los aragoneses y también de la Corona. Estoy muy agradecida, de verdad, por lo que he vivido aquí durante este tiempo, por todo lo que me ha dado esta ciudad.
Hoy es un día especial porque el cariño de muchísimas personas de esta tierra queda reflejado en los reconocimientos con los que me distinguís: el título de hija adoptiva de Zaragoza, la Medalla de las Cortes y la Medalla de Aragón. Mi padre lo vivió de un modo parecido hace casi 40 años y en estos días hemos hablado mucho de ello. Seguir sus pasos significa mucho para mí.
Gracias Zaragoza. Gracias Aragón. Gracias a todos los que habéis hecho posible que en este tiempo me sienta una aragonesa más. ¡Gracias!”.
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