Tres días después de que se hiciera público el escándalo que involucra a Emvarias de EPM por, presuntamente, recibir pagos en especie de boletas y palcos a cambio de ofrecer sus servicios de aseo en varios de los eventos más importantes de la ciudad de Medellín mientras Daniel Quintero estuvo a cargo, en las últimas horas se conoció que una persona cercana al contralor distrital, Pablo Andrés Garcés, podría estar involucrada.
De hecho, existe una imagen en la que aparece Yeidy Lizeth Gallo Guerra, expareja del contralor y que estuvo en el concierto de Bad Bunny en noviembre de 2022, justamente uno de los eventos que hoy está en la mira del Concejo de Medellín por el contrato sin soporte contable que se suscribió entre Emvarias y los organizadores.
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De hecho, para el World’s Hooters Tour, realizado el 18 de noviembre de 2022 en el estadio Atanasio Girardot, Emvarias cotizó el servicio de limpieza en 47.647.009, pero solo facturó 21.504.251 y recibió un canje por valor de $24.730.000, equivalente al palco “La Plata”. Según la denuncia, de este intercambio tampoco quedó soporte contable.
La foto en cuestión fue tomada y publicada en redes sociales por la periodista Natalia Gallo Jaramillo, entonces pareja del exconcejal Jaime Cuartas, un alfil político del exalcalde Daniel Quintero. En la imagen aparecen varios asistentes, incluyendo a Gallo Guerra en el extremo derecho, a Cuartas y su pareja al centro y al exgerente de Emvarias Carlos Borja en el extremo izquierdo.
Yeidy Lizeth Gallo Guerra trabaja como abogada para la Alcaldía de Envigado desde enero de 2022 y previamente tuvo contratos con diversas entidades, incluyendo la Personería de Sabaneta y Metrosalud.
La presencia de Gallo Guerra, la entonces pareja del contralor, junto a un funcionario de Emvarias, entidad que debía auditar, ha generado sospechas de posibles irregularidades. Sin embargo, en diálogo con El Colombiano, el contralor de Medellín aseguró que, aunque en el momento que se tomó la fotografía era esposo de Gallo Guerra, las boletas para ingresar al concierto de Bad Bunny fueron adquiridas con recursos propios, enfatizando que su relación con Cuartas y Borja era de cordialidad y respeto.
Por su parte, el concejal De Bedout solicitó a la Contraloría General de la República investigar si hubo detrimento patrimonial debido a estos supuestos canjes, mientras que la concejala Claudia Carrasquilla presentó la fotografía públicamente el pasado 22 de junio, como soporte de las posibles irregularidades.
Además del evento de Bad Bunny, otros conciertos, como el de Maluma el 30 de abril de 2022, también están bajo la lupa. Emvarias cotizó el servicio de aseo para este concierto en 10.636.790, pero solo facturó 5.316.790 y reportó un canje por $5.320.000. Esto también ha generado descontento, ya que se alega que dichos intercambios no tienen soporte contable.
Incluso, durante la administración Quintero se conoció que hubo ocasiones en que el exalcalde y su esposa Diana Osorio invitaron a estos eventos a influenciadores de Bogotá muy cercanos al Gobierno nacional. De hecho, una fuente que asistió al evento de Bad Bunny y solicitó anonimato explicó a El Colombiano que no se puede determinar con facilidad si el origen de todas las boletas fueron un canje, ya que algunas fueron regaladas y otras compradas.
Por su parte, Carlos Borja, exgerente de Emvarias, calificó de “irresponsable” presentar solo partes de los procesos contractuales y afirmó que es falso que se hayan realizado canjes. Según comentó al medio nacional, todos los trámites se han hecho bajo los reglamentos estipulados y sin beneficiar a ningún cliente.
“Buscamos a los grandes empresarios de los conciertos de Medellín para que contrataran servicios de aseo con Emvarias”, dijo, destacando que se prestaron más de noventa servicios. Además, reconoció que en algunas ocasiones recibió boletas de cortesía, pero insistió que no se trataba de canjes.
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