La Secretaría de Comercio planea publicar en las próximas horas la normativa que falta para que las economías regionales puedan sumarse al dólar agro. Se trata del mecanismo por el cual las firmas de esos sectores se inscribirán en Precios Justos, una de las condiciones que puso el Ministerio de Economía para permitirles el acceso al tipo de cambio diferencial para exportar.
Con el ingreso de las empresas al programa de control de precios, las economías regionales quedarían así alcanzadas por los principios de ese esquema y que rige actualmente para unas 500 compañías, de diversos rubros: aumentos de precio autorizados para una canasta amplia y acceso a dólares para la importación de insumos.
En la secretaría que conduce Matías Tombolini estiman que la resolución sería publicada, si no existieran contratiempos, este martes en el Boletín Oficial. “La resolución explica el procedimiento que deben seguir las empresas para acceder al beneficio y los incorpora a Precios Justos”, mencionó una fuente oficial. El proceso de inscripción de las empresas comenzaría, si así fuera, el miércoles.
El programa de dólar agro comenzó la semana pasada con las primeras liquidaciones del complejo sojero más las de este lunes, que sumaron en total USD 960 millones, según estimaciones de la Bolsa de Comercio de Rosario. Para las economías regionales, que son las nuevas invitadas al esquema de tipo de cambio más alto para impulsar las exportaciones, el proceso fue más lento.
El Gobierno busca, en términos prácticos, que ese precio preferencial para la venta al exterior no sume presión inflacionaria. Por lógica, un dólar más alto convertiría en más conveniente destinar mayor parte de la producción a la exportació en lugar de direccionarlo al mercado doméstico. Una estimación de la consultora PxQ mostró que todas las economías regionales que podrían estar incluidas en el dólar agro representaban el 40% de la canasta que compone el IPC.
Las empresas esperaban hasta última hora la salida de las resoluciones oficiales, aunque ya daban por descontado que quedarán incluidas en la pauta de incremento mensual de 3,2% autorizado para la mayor parte de la canasta. Precios Justos también contiene un grupo de productos -más limitado- con valores congelados. En el Gobierno todavía no especificaron si las economías regionales deberán congelar algunos de sus productos para ser parte del dólar agro.
El paisaje amplio de economías regionales contiene realidades diversas, y hay casos en que las empresas son netamente exportadoras, por lo que no tienen producción local que abastecer o precios alcanzados por programas como el que fiscaliza Comercio. El dólar agro también tiene condicionalidades de tipo laboral: las firmas que ingresen no podrán achicar su planta de personal.
Algunos sectores de las economías regionales son más exportadores que otros. Un informe reciente de la Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de Argentina (FADA) citado por Infobae midió que de los productos de las economías regionales, el 94% de la producción de té se exporta, en el maíz llega al 59%, en el limón al 85%, la pesca un 61%, peras un 49%, legumbres un 62%, manzanas un 24%, arroz un 42%, forestación un 19%, la yerba mate un 14% y la uva un 19 por ciento.
La Secretaría de Agricultura, publicó hoy en el Boletín Oficial un listado de economías regionales que podrán ser sujetas a sumarse al dólar agro, que para ese caso regirá hasta el próximo 31 de agosto y a un valor de 300 pesos por dólar.
En los productos que aparecen en la nómina, se encuentran: muchos productos de la pesca, miel natural, hortalizas secas, aceitunas, garbanzos, porotos y las demás legumbres, arvejas, espárragos, limones y su aceite natural, frutos secos, uvas y pasas, cerezas ácidas, ciruelas, ajos, porotos, y arándanos rojos, mirtilos y demás frutos del género Vaccinium.
Además, estarán contemplados por la medida oficial: té verde y negro, maíz pisingallo, maní en sus distintas variedades, aceite de maní, aceites de pescado, ceras vegetales, aceite de oliva, aceite de jojoba, maíz dulce, extractos de carne bovina, preparaciones de pescado, vinos, tabaco, harina de carne y pescado, forestación, lanas, aceite de limón, entre otros productos.
La inflación en alimentos, el riesgo que busca acotar el Gobierno
Los primeros números de subas de precios de alimentos de abril muestran señales poco alentadoras, de acuerdo a consultoras que siguen las variaciones de manera semanal.
De acuerdo a un informe publicado este lunes por la consultora EcoGo, durante la segunda semana del mes su relevamiento arrojó un incremento de precios de 2,7% de los alimentos en relación con la primera semana de abril. En ese sentido, midieron que con una proyección de 1,8% para las dos semanas que restan, los alimentos terminarían abril con un incremento mensual de 8,2 por ciento.
Por otra parte, en términos generales el IPC del cuarto mes del año se ubicaría así en 7%, según EcoGo. El dato global de inflación se explicaría por la suba de alimentos, de prepagas, colegios privados, servicio doméstico, tarifas de tres y colectivo, tarifas de energía eléctrica y combustible, que implicaron una resistencia a la baja tras el 7,7% de marzo.
La Fundación FIEL midió en la primera semana de abril una inflación de 3,1% general y de 3,9% en alimentos, en un relevamiento que realiza ese centro de estudios en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA). Para las últimas cuatro semanas, su sondeo registra un 7,6% de avance general de precios y 10,2% en alimentos.
Para la consultora LCG, “en la segunda semana de abril el índice cerró con un aumento de precios del 2,9% semanal, acelerando en 0,4 puntos respecto a la semana previa. En lo que va del mes se acumula un incremento total del 5,5%. La inflación promedio mensual aceleró por segunda semana consecutiva, ubicándose en el 5,6%”, indicaron en un informe reciente.
“Esta semana el porcentaje de productos con aumentos de precios continuó por encima del promedio de las últimas 4 semanas: 33,4% de la canasta total. A pesar de contar con 2 semanas de pocas subas, el promedio mensual de productos con aumentos es de 24,6% actualmente. Esto significa que el total de la canasta ajusta, en promedio, una vez por mes”, estimaron.
Por otra parte, LCG consideró que no hay demasiados elementos que expliquen la aceleración inflacionaria más allá de la inercia y las expectativas desancladas. “Más allá de los aumentos autorizados de cada mes, lo que preocupa es que no parece haber un factor puntual que esté empujando la inflación”, apuntó la consultora.
“Las tarifas y el tipo de cambio corren todavía por detrás a los precios, la actividad no tiene un dinamismo para impulsar al alza a los precios, los salarios lejos están de ganar la carrera y los factores de oferta a nivel internacional están cediendo. Simplemente las expectativas de inflación parecen ser las que la sostienen en registros de 3 dígitos, con el riesgo de tener un dato mensual de dos dígitos más temprano que tarde”, continuó.
Seguir leyendo:
Tras el viaje de Massa, el Gobierno retomó la discusión técnica con el FMI por las nuevas metas
Un conflicto sindical paraliza los puertos del país en plena vigencia del “dólar agro”
Dictamen positivo de la UBA a la operación de canje de bonos de la Anses que dispuso Economía
Hacer Comentario