Fue un super miércoles que no conformó a los inversores. La inflación local de 4,2% fue más alta de lo esperada, la licitación del Tesoro captó lo que necesitaba para cubrir los vencimientos y dejó afuera $250 mil millones, mientras el alza de precios de Estados Unidos y los indicadores de vivienda no fueron lo que estimaban los analistas.
Lo que más preocupó a los inversores locales es que la inflación núcleo fue de 4,1% contra 3,8% del mes anterior. El analista financiero Salvador Vitelli sintetizó la decepción. “Hay una inercia en la inflación. Hace meses, el mercado estimaba un piso de entre 4,5% y 5% que iba a ser duro de perforar. Llegó a pisos más bajos, pero al mirar la inflación núcleo se observa que en los últimos 4 meses fue de 3,7% en mayo y junio; 3,8% en julio y 4,1% en agosto. Son niveles crecientes, pero hay que tener en cuenta que los precios regulados (tarifas y combustibles) avanzaron por encima del nivel general y eso es positivo por la corrección de precios relativos. Además, en precios regulados hay componentes que venían atrasados, que hacen que esta inercia fuera esperable”.
“De todas maneras, es un dato que genera preocupación. Creo que la desinflación sigue, pero cada punto cuesta más. Esto está marcado porque se espera la salida del cepo que, junto a un ancla nominal, podrían inducir a una convergencia a la baja. La inflación no me preocupa, pero me hace ver que el programa necesita cierta recalibración, algunas medidas heterodoxas, para perforar estos puntos. Todo depende de un escenario donde no haya controles de capital que es el puntapié que espera el mercado en cuanto a medidas macro, para relajarse y pensar en una normalización sostenida”, agregó Vitelli.
Las esperanzas ahora se pospusieron un mes, porque el índice de septiembre se conocerá en la segunda semana de octubre. Se cree que con el recorte del impuesto PAIS puede quebrar esta inercia y ubicarse en 3,5%.
!function(e,n,i,s){var d="InfogramEmbeds";var o=e.getElementsByTagName(n)[0];if(window[d]&&window[d].initialized)window[d].process&&window[d].process();else if(!e.getElementById(i)){var r=e.createElement(n);r.async=1,r.id=i,r.src=s,o.parentNode.insertBefore(r,o)}}(document,"script","infogram-async","https://e.infogram.com/js/dist/embed-loader-min.js");
El mercado se decepcionó pero no hubo un escenario de catástrofe. El dólar abrió en alza, pero hubo una fuerte intervención del Banco Central al final de la rueda los bajó $8 y devolvió al MEP a los mismos valores de la rueda anterior de $1.230. El contado con liquidación (CCL) cerró con una caída de $4,05 (-0,3%) a $1.245,08. El “blue” tuvo una leve alza de $5 a $1.285.
En el Mercado Libre de Cambios (MLC) se operaron escasos USD 212 millones que le permitieron al Banco Central comprar 21 millones, pero las reservas brutas bajaban 26 millones a USD 27.219 millones.
Según el informe de F2 de Andrés Reschini “en materia de futuros, hubo ajustes negativos, aunque la mayor baja porcentual para posiciones con operaciones fue del 0,17% para el caso de febrero 2025. La suba de tasas implícitas que venía registrándose en las últimas dos ruedas se detuvo, ante el predominio de la fuerza vendedora”.
!function(e,n,i,s){var d="InfogramEmbeds";var o=e.getElementsByTagName(n)[0];if(window[d]&&window[d].initialized)window[d].process&&window[d].process();else if(!e.getElementById(i)){var r=e.createElement(n);r.async=1,r.id=i,r.src=s,o.parentNode.insertBefore(r,o)}}(document,"script","infogram-async","https://e.infogram.com/js/dist/embed-loader-min.js");
En tanto, en la licitación de bonos del Tesoro, el 50% de lo captado fue en los plazos más cortos. Entre las LECAP que vencen en diciembre y las de febrero, se alzaron con $3,43 billones a tasas de 3,75% y 3,90%. Si se le suma lo captado entre marzo y abril ($,61 billones) se explica 72% de la licitación. El resto se repartió entre LECAP que llegan hasta el 12 de setiembre de 2025 que paga 3,95%, la tasa más alta, y BONCER que vencen entre 2025 y 2027 que se alzaron con $410 mil millones. La licitación no dejó excedentes porque el monto captado es para pagar vencimientos.
Los bonos CER, antes del dato de inflación, habían subido hasta 0,4% en el mercado secundario.
Los bonos soberanos, abrieron en baja, pero se recuperaron paulatinamente. El riesgo país bajó apenas 5 unidades (-0,3%) a 1.445 puntos básicos. Fueron a contramano de los bonos de países emergentes, que tuvieron demanda del exterior y subas casi generalizadas porque ven que en Estados Unidos van a bajar los rendimientos cuando la Reserva Federal recorte la tasa de interés.
!function(e,n,i,s){var d="InfogramEmbeds";var o=e.getElementsByTagName(n)[0];if(window[d]&&window[d].initialized)window[d].process&&window[d].process();else if(!e.getElementById(i)){var r=e.createElement(n);r.async=1,r.id=i,r.src=s,o.parentNode.insertBefore(r,o)}}(document,"script","infogram-async","https://e.infogram.com/js/dist/embed-loader-min.js");
La euforia estuvo en la Bolsa. Los negocios superaron los $53 mil millones y el Merval de las acciones líderes subió 2,9% en pesos y 3,2% en dólares. Las más favorecidas fueron las empresas energéticas. Central Puerto subió 6,32%; Edenor, 6,31% y Transportadora Gas del sur, 5,38%.
Los ADR -certificados de tenencia de acciones argentinas que cotizan en las Bolsas de Nueva York- terminaron la rueda en alza. Lo mejor pasó por Corporación América (+7,1%), Central Puerto (+6,5%) y Edenor (+5,7%).
Para hoy se espera una reacción de los bonos soberanos tras la noticia de que la Cámara de Diputados no logró los votos necesarios para la reforma jubilatoria y deja en pie el DNU presidencial.
Hacer Comentario