El Gobierno informó que, como parte del ajuste fiscal para 2024, desde febrero el boleto mínimo de colectivos en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) pasará de $76,90 a $270, es decir, un fuerte aumento del 251% que golpeará el bolsillo de los usuarios. Esa noticia puso en el centro de la escena cuánto se paga por ese servicio en el interior de la Argentina.
Hasta este mes la tarifa que se paga en el AMBA es la segunda más baja del país, solo por encima de la de San Luis capital que se encuentra en $70 para el servicio urbano. Neuquén presenta el boleto más elevado a nivel federal con un precio de $370, seguido por Bahía Blanca con $345, Viedma con $300 y Mar Del Plata con 297 pesos.
Así surge de un relevamiento realizado por el Instituto Interdisciplinario de Economía Política (IIEP) de UBA-Conicet, en donde destacaron además que la tarifa media en las provincias, excluyendo la región metropolitana de Buenos Aires, es de $216,60 actualmente. “Es importante destacar que las diferencias se explican por una diversidad de factores entre los que se encuentran la presencia de economías de aglomeración, diferencias en las franquicias de pago implementadas, los kilómetros realizados, la antigüedad de parque automotor, la frecuencia del servicio, etcétera”, precisaron.
Por otro lado, el IIEP aclaró que el Estado Nacional no tiene competencia en materia de transporte público en las provincias con excepción de algunos recorridos interjurisdiccionales. “Por esto, la celebración de contratos, fijación de tarifas y recorridos corresponde a los gobiernos provinciales y locales según el caso”, afirmaron.
A finales de diciembre el Gobierno dispuso para la segunda quincena de enero una suba en las tarifas de autotransporte de pasajeros de jurisdicción nacional y del servicio ferroviario en el AMBA a través de la resolución 8/2023 del Ministerio de Infraestructura. En concreto, allí se actualizaron las tarifas en base a la inflación acumulada hasta octubre, ya que la gestión anterior había decidido en el marco de la campaña electoral un congelamiento de precios.
Esa decisión llevó el boleto mínimo de colectivos que circulan en el Gran Buenos Aires y CABA a los actuales 76,92 pesos. En tanto, los ferrocarriles Mitre, Sarmiento y San Martín pasaron a $48,4 y para los Ferrocarriles Roca, Belgrano Norte, Belgrano Sur y Urquiza a 37,4 pesos.
Cuáles serán los precios de trenes y colectivos en febrero
El viernes pasado la Secretaría de Transporte publicó en el Boletín Oficial la Resolución 1/2024 en donde convocó a una audiencia pública como paso previo al incremento que esperan aplicar desde febrero. Será del 251% para las líneas de colectivos del AMBA, 169% para los Ferrocarriles Mitre, Sarmiento y San Martín y 248% para los Ferrocarriles Roca, Belgrano Norte, Belgrano Sur y Urquiza.
Si se aplica en forma íntegra el aumento propuesto, el boleto mínimo pasará de los actuales $76,92 a $270 y servirá para viajar hasta tres kilómetros. La tarifa que le sigue (de tres a seis kilómetros, la más utilizada por los pasajeros del AMBA) se incrementará de $85,96 a $300,78, y la siguiente, de seis a doce kilómetros, llegará a $323,95 desde los $92,29 actuales. Las dos tarifas más caras (de 12 a 27 kilómetros y de más de 27) tendrán un valor de 347 a 370 pesos, respectivamente. Los descuentos por tarifa social continuarán vigentes.
Una novedad es que habrá un precio diferente, casi 60% más caro, para quienes usen tarjetas SUBE sin nominalizar, es decir, que usen la de un tercero o que no hayan registrado la suya a su nombre. Para estos casos, la tarifa propuesta parte de los $430 para el tramo más corto y llega a los $589,54 para el más largo.
En todas las líneas de ferrocarriles del AMBA el pasaje mínimo pasaría a costar $130 (en la línea Mitre, por ejemplo, hoy sale $48,38), mientras que la sección dos saltaría a $169 y el boleto más caro $208. Tomando como referencia la línea Mitre, la suba ronda el 170% respecto de los valores actuales, aunque varía según el punto de partida de cada ramal.
En el caso de los trenes, el uso de tarjetas SUBE sin nominalizar implicará pagar el doble de tarifa. Y las multas por evadir el pago del pasaje serán de 10 veces la tarifa máxima, es decir $2.080 en total. También se mantendrá la tarifa social, que paga el 45% del precio.
Golpe al bolsillo
Según el Investigador del Instituto de Estudios y Formación de la CTA, Luis Campos, el aumento de transporte público tendrá un impacto desigual en los ingresos de los asalariados. “Le pega mucho más fuerte a los trabajadores de menores recursos, que son los que gastan una parte más importante de su salario para ir y volver de casa al trabajo”, afirmó.
“Un trabajador que tiene que tomar dos colectivos para ir al trabajo en enero gastó aproximadamente $5.600 en transporte (2 viajes de $85,69 x 22 días). En febrero va a pasar a gastar $19.800, un aumento del 250 por ciento. En un salario promedio del sector privado registrado implica una caída del 2%, que se va a sumar a lo que pierdan contra la inflación. Pero la situación es mucho peor en los trabajadores de la base de la pirámide salarial”, explicó.
“El mayor impacto lo van a sufrir las trabajadoras de casas particulares, que tienen los peores salarios y suelen viajar más para ir a su trabajo. Para quienes trabajen con retiro a jornada completa la caída va a ser, como mínimo, del 8,4% del salario, solo por este aumento del boleto”, resaltó Campos.
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