La historia detrás de la orden de borrar la imagen del Cristo de Pachacamilla, que también restringió las reuniones de sus devotos
Al Señor de los Milagros también se le conoce como el Cristo de Pachacamilla.
(Composición Infobae: Difusión)El ‘mar humano’, como lo llamaba la prensa de antaño, avanza lentamente por las avenidas y arterias de Lima. En su recorrido, se pueden observar vestigios de la época virreinal, junto al fervor popular por el Señor de los Milagros. Este panorama se repite cada octubre, cuando las plegarias se transforman en alabanzas, cánticos y rezos que llenan el aire con un hálito de esperanza.
Miles de fieles avanzan lentamente por los jirones donde, en un día normal, circulan vehículos repletos de pasajeros apresurados por llegar a sus trabajos. En la procesión del Cristo Morado no hay lugar para la prisa ni para los autos, pero sí para el fervor y la devoción de personas que llegan desde distintas partes del Perú, todas unidas para adorar una imagen que, según muchos testimonios, realiza milagros.
Precisamente, un milagro es lo que busca más de una persona que, con velas en mano, flores o..