El candidato del PSL, Jair Bolsonaro (Reuters)Jair Bolsonaro, candidato del Partido Social Liberal (PSL), se impuso este domingo en segunda vuelta y es el nuevo presidente de Brasil, rompiendo el liderazgo del Partido de los Trabajadores (PT) en las últimas cuatro elecciones.El capitán de la reserva del ejército brasileño y diputado federal desde hace más de dos décadas alcanzaba el 55,14% de los votos y superó de esta forma al candidato petista Fernando Haddad, que obtuvo el 44,86%, de acuerdo a los resultados oficiales publicados por el Tribunal Superior Electoral, con el 99,95% de los votos escrutados.La participación en estas elecciones marcadas por la polarización, el descrédito del PT luego del encarcelamiento de su líder, Luiz Inácio Lula da Silva, y el surgimiento de la polémica figura de Bolsonaro, un ultraderechista que promete una guerra contra el crimen y la corrupción y que fue apuñalado en plena campaña, se ubicó en el 78,71%.Simpatizantes de Bolsonaro tras la victoria (Reuters)En la primera vuelta había sido del 79,76%, por debajo del registrado en las últimas elecciones.De esta manera Bolsonaro consolidó y amplió el apoyo recibido el 7 de octubre en la primera vuelta, cuando llegó al 46,03%, a sólo cuatro puntos de imponerse en esa instancia, y logró alejarse de Haddad, que alcanzó el 29,28%, y Ciro Gomes, del Partido Democrático Laborista (PDT), que llegó al 12,47%."Todos juntos cumpliremos la misión de rescatar a nuestro país", dijo Bolsonaro tras la victoria. Mientras que Haddad señaló que él y sus seguidores tienen "la responsabilidad de hacer una oposición colocando el interés nacional por encima de todo".Bolsonaro durante la votación en Río de Janeiro (Reuters)El nuevo mandatario del país más grande y poblado de América Latina asumirá en el Palacio do Planalto en Brasilia el 1 de enero de 2019 junto a su vicepresidente Antônio Hamilton Mourão, ex general del ejército que pasó a retiro este año para sumarse a la campaña.Reemplazará de esta forma a Michel Temer (PMDB), quien accedió a la presidencia en 2016 luego de la destitución de la presidenta Dilma Rousseff (PT), primero en forma interina y luego de manera estable hasta la celebración de estas elecciones. Temer había sido vicepresidente de Rousseff, por lo que accedió al máximo cargo luego del juicio político y de acuerdo a la Constitución brasileña.Bolsonaro rompió, de esta manera, con el dominio del PT, que se había impuesto en las elecciones de 2014, 2010, 2006 y 2002, gobernando Brasil durante 14 años primero a través de Lula, ahora cumpliendo una condena por corrupción en el contexto de la operación anticorrupción "Lava Jato", y luego con Rousseff a la cabeza.Fernando Haddad, del PT, fue derrotado en segunda vuelta (Reuters)Su fugaz ascenso de este año tuvo lugar en medio de un fuerte descrédito del PT y de prácticamente todos los partidos políticos tradicionales en Brasil, golpeados por los escándalos de corrupción primero del Mensalão y luego el Petrolao, así como también de un contexto de crisis económica y un fuerte aumento de la criminalidad.Con un fuerte discurso homofóbico, xenófobo y misógino, pero también con promesas de luchar contra el crimen y la corrupción, Bolsonaro generó un enorme revuelo en Brasil durante la campaña, generando apoyos y rechazos y consolidándose como la primera opción.MÁS SOBRE ESTE TEMA:Jair Bolsonaro, el capitán del Ejército que le declaró la guerra al establishment político y está a un paso de la presidenciaJair Bolsonaro volvió a votar con un chaleco antibalas: "La expectativa es de victoria"Fernando Haddad, el candidato suplente al que sólo quería Lula, ante el reto de una remontada histórica
Jair Bolsonaro y Fernando HaddadEn la víspera de la segunda vuelta de las elecciones de Brasil, las encuestadoras Ibope y Datafolha dan por ganador al ultraderechista Jair Bolsonaro, con una diferencia que ronda los 10 puntos porcentuales sobre su rival Fernando Haddad. La encuesta de Datafolha publicada el sábado muestra a Jair Bolsonaro con 55% de la intención de voto contra un 45% del sucesor de Luiz Inácio Lula da Silva y candidato del Partido de los Trabajadores (PT). Los números son resultado de 18.371 entrevistas, realizadas en 340 municipios durante el viernes y el sábado.Ibope, por su parte, publicó un sondeo realizado sobre unos 3 mil electores que difiere en apenas un punto del de Datafolha: le otorga 54% de la intención de voto a Bolsonaro, contra un 46% a Haddad. Más temprano, otro sondeo ubicaba también a Bolsonaro como ganador, con 56,8% de los votos, contra un 43,2% a Haddad. En ese caso, la firma MDA entrevistó a 2.002 electores de 137 ciudades de todas las regiones del país, entre este viernes y sábado.Los tres sondeos indican un achicamiento de la diferencia de votos entre ambos candidatos en favor de Haddad, después de que en la última semana esa diferencia rondara los 20 puntos porcentuales.'Virada' en apurosHaddad, de 55 años, fue designado candidato en septiembre, en reemplazo de Lula, que purga desde abril una pena de 12 años de cárcel por corrupción, en el marco de la operación "Lava Jato" que golpeó de lleno a grandes figuras del PT y sus aliados.El ex alcalde de Sao Paulo (2012-2016) obtuvo en la primera vuelta el 29% de los votos, frente al 46% de Bolsonaro.Fuerzas políticas de centro-izquierda y activistas dentro del propio partido han criticado al PT por no haber hecho un 'mea culpa' por sus errores y haberse alejado de las clases populares, impidiéndole a Haddad formar un "frente democrático" para el balotaje.En su último acto de campaña, el ex ministro de Lula realizó una "caminata por la paz" en Heliópolis, una de las mayores favelas de Sao Paulo. Varios centenares de seguidores lo acompañaron por las estrechas callejuelas de la barriada, en clima de fiesta y vestidos de blanco."La población está tomando conciencia del salto a lo desconocido que significa la candidatura de Bolsonaro. (…) Nos están queriendo vender gato por liebre, una persona truculenta por una persona pacífica", afirmó."La virada (remontada) vendrá. Brasil está despertando", añadió.Las elecciones "no están ganadas"Mientras, Bolsonaro daba los últimos pasos de su campaña desde su casa, en Río de Janeiro, como viene haciendo desde que fue apuñalado en un mitin el 6 de septiembre y pasar tres semanas hospitalizado.El ultraderechista lamentó no estar cerca de la gente "por limitaciones médicas", y pidió a sus seguidores que "no relajarse"."Las elecciones no están ganadas, tenemos que luchar hasta último momento (…) No vamos a dar la oportunidad para que el otro lado diga 'ganamos, fue una remontada'", recordó a sus seguidores en una transmisión por Facebook.Famoso por su retórica exaltada, nutrida de comentarios machistas, racistas y homófobos, Bolsonaro ha intentado moderar el tono en las últimas horas. En esa última transmisión dijo también: "Queremos un Brasil libre, que deje los prejuicios: blanco, negro; homo, hetero; quién sabe si yo soy gay, y si yo fuera, cuál es el problema", dijo, acompañado del diputado electo Helio Negão, un hombre negro.También ha procurado alejar el temor de que su gobierno podría significar un regreso a los años sombríos de la dictadura militar (1964-1985).Con información de AFPMÁS SOBRE ESTE TEMA: Bolsonaro ganaría el ballotage en Brasil con un 56,8% de los votos, según una encuesta de MDA